miércoles, 30 de octubre de 2013

50 años sin Edith Piaf

Esta mañana me he sorprendido cuando en el telediario han dado la noticia de una exposición en París sobre la figura de Edith Piaf. Sonaba de fondo de noticia un canción francesa que últimamente escuchamos mucho en casa, titulada "sous le ciel de Paris" en versión de Piaf:

Leyendo algunas biografías en Internet me he sorprendido ante el drama auténtico que fue su vida desde el mismo momento de su nacimiento. Su padre abandonó a su madre, que afrontó el parto sola y no pudo llegar a ningún hospital, así que Edith nació en la calle, bajo una farola.

Su madre, demasiado joven y pobre para alimentarla, la confió a su abuela, que la alimentaba con vino para eliminar microbios. Vuelve con su padre, que ahora debe marchar a la Primera Guerra Mundial, y éste la confía a la abuela paterna de Edith, que regenta un prostíbulo, donde es criada.

Tras la guerra, es su padre quien le enseña el ambiente bohemio y artístico del París de Montmartre hasta que a sus 14 años, Edith "abandona" a su padre para vivir su vida.

Desde aquí una carrera marcada por la canción, amoríos, desamores, adicciones, discos, cabaret, películas y giras y un drama vital continuo que consumieron su vida en un mes de octubre del año 1963.

Fue mentora de varios artistas, y muy influyentes en varios jóvenes de la canción francesa.
Quizá sea mundialmente conocida por la canción "Non, je ne regrette rien", que prácticamente plasma en música y letra lo que fue su vida.

Aquí un fragmento de la película basada en su vida "La vida en Rosa" con su célebre canción:




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